El Plan Mérida

Posted on 26 marzo 2010 por Edwin Doe

El Plan Mérida es un tratado bilateral entre Estados Unidos y México, con una participación menor de países centroamericanos, este plan constituye un esfuerzo internacional en la lucha contra el narcotráfico. Desde la entrada de Felipe Calderón a la presidencia mexicana se ha declarado una guerra contra el narcotráfico, una ‘guerra civil’ que ha cobrado más de 10 mil vidas.

Mientras que México se encontraba en esta lucha contra los grandes carteles de drogas, Estados Unidos aplicaba presión ya que se consideraba que este era un problema que afectaba a ambas naciones. Años después Felipe Calderón logró que Estados Unidos aceptara gran parte de la responsabilidad del problema, argumentando que las drogas eran consumidas, en su gran mayoría, por estadounidenses y además ellos eran también responsables por el tráfico de armas usadas por los narcotraficantes.

Con la visita de Hillary Clinton a México se han aclarado muchas cosas. La Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA) ha declarado que esta lucha no es una que México puede librar por sí mismo y ha llamado a Estados Unidos a tomar su parte de la responsabilidad en el problema (El Universal). Podemos ver este cambio de perspectivas inclusive en los medios estadounidenses en donde los reporteros le adjudican gran parte de la responsabilidad sobre los problemas del narcotráfico a la población estadounidense. Por ejemplo el artículo del New York Times menciona que Estados Unidos ha convertido a México en una súper ruta de drogas, también hace mención sobre las armas que los estadounidenses venden a los cárteles de narcotráfico. Los Angeles Times atribuye parte de la responsabilidad a los Estados Unidos publicando la siguiente declaración de Patricia Espinosa: “Nos queda claro que el tráfico de armas ilegales y dinero han fomentado la violencia en nuestro país.” La Crónica, por otra parte, ha publicado un artículo que habla sobre la prestación de recursos y elementos que Estados Unidos está dispuesto a poner a la disposición de las autoridades mexicanas para ayudarlas en la guerra contra el narcotráfico.

En hora buena Estados Unidos ha aceptado su parte de la responsabilidad en problemas relacionados con los cárteles de narcotráfico mexicanos. Nuestro vecino del norte se encontraba en la cómoda posición de acusar a nuestro gobierno de incompetente y administrar presión ya que el narcotráfico afectaba la seguridad del estado norteamericano, no obstante, con la reciente concientización de la culpa que comparte Estados Unidos hemos adquirido a un aliado poderoso contra el crimen organizado que ahora está dispuesto a tomar responsabilidad de los problemas que este mismo ha contribuido a formar. Esto no quiere decir que la guerra contra el narcotráfico ahora será fácil, pero si quiere decir que ahora no enfrentaremos este problema solos.